Durante la Semana Santa, Qormi destaca por sus profundas tradiciones religiosas e importantes manifestaciones públicas de fe, especialmente la histórica procesión del Viernes Santo, que se remonta a 1764 y cuenta con más de 800 participantes, entre ellos unas 120 personas que portan estatuas de tamaño natural que representan escenas de la Pasión de Cristo —entre ellas Verónica, María Magdalena y Nuestra Señora de los Dolores—, con piezas singulares como La Última Cena, que aportan un sello local distintivo.
Las celebraciones comienzan con la Procesión de Nuestra Señora de los Dolores, que se realiza en ambas parroquias y congrega a multitudes procedentes tanto de Qormi como de toda la región sur de Malta. El Domingo de Ramos sigue con recreaciones de figuras bíblicas vinculadas a la Pasión.
Durante toda la Semana Santa, las calles se llenan de vida con vendedores que ofrecen dulces típicos de Cuaresma, como los qagħaq tal-Appostli (rosquillas de los Apóstoles) y los karamelli tal-ħarrub (caramelos de algarroba), combinando devoción y celebración.
Las festividades culminan el Domingo de Pascua con la Procesión de Cristo Resucitado en cada parroquia, cuyo momento más emblemático es la tradicional carrera con la estatua de Cristo de regreso a la iglesia —un poderoso símbolo de renovación y de la alegría de la Resurrección.